Alicia en el País de las Maravillas es una de las historias más famosas de la literatura infantil y ha cautivado a niños y adultos por igual durante generaciones. En esta maravillosa y surrealista historia, Alicia se adentra en un mundo mágico y se encuentra con una serie de personajes inolvidables, como el Conejo Blanco.

El Conejo Blanco es un personaje fundamental en la trama de esta historia. Es famoso por su apresurada forma de moverse y por su icónica frase "¡Oh no! ¡Voy a llegar tarde!" El Conejo Blanco es quien atrae la curiosidad de Alicia y la lleva a seguirlo hasta su madriguera, dando inicio a su increíble aventura en el País de las Maravillas.

Aunque el Conejo Blanco no tiene un nombre específico en la historia, a menudo se le llama simplemente "el Conejo Blanco". Su aspecto es también muy característico, con su elegante traje y su reloj de bolsillo. Es un personaje entrañable y misterioso que despierta la imaginación de los lectores.

A medida que Alicia explora el País de las Maravillas, sigue al Conejo Blanco en su apresurada carrera a través de paisajes extraños y personajes extravagantes. Este personaje es un elemento central en la trama y representa la puerta de entrada al mundo de fantasía en el que Alicia se sumerge.

En conclusión, el Conejo Blanco es uno de los personajes más icónicos de la historia de Alicia en el País de las Maravillas. Aunque no tiene un nombre en concreto, su apariencia y su peculiar forma de ser lo convierten en un personaje querido y reconocible. Sin duda, el Conejo Blanco es uno de los aspectos más destacados de esta historia mágica y fascinante.